La responsabilidad social de corporativa (RSC) es un compromiso voluntario que está convirtiéndose paulatinamente en una prioridad cada vez más importante para todo tipo de empresas, independientemente de su índole y tamaño.
En el contexto de creciente globalización, de mayor sensibilización social y medioambiental y de mayor fluidez de las comunicaciones, el concepto de responsabilidad de las empresas ha cobrado un nuevo impulso. La seguridad y la salud en el trabajo (SST) es un componente esencial de la RSC y ello plantea a los gestores y profesionales de la SST un amplio abanico de oportunidades y desafíos.
Como se ha indicado, la RSC es un compromiso voluntario cuyos objetivos y actuaciones deben dirigirse siempre, claramente, más allá de los niveles mínimos de protección de los trabajadores. Confiere a las empresas la oportunidad de comprometerse más a fondo en la SST. Abarca tanto las necesidades internas de los trabajadores como las necesidades sociales externas. Esto significa, a efectos de SST, velar por que los empleados se beneficien de un nivel de salud y de seguridad en el trabajo superior al establecido en la normativa y tener en cuenta las implicaciones externas, tales como la aplicación de criterios de SST en la selección de subcontratistas o en el proceso de comercialización.
La RSC confiere a las empresas la oportunidad de comprometerse más a fondo en la SST. Ahora bien, ello implica recorrer con prudencia una trayectoria que conduzca a consolidar los logros adquiridos en materia de SST y a la vez evite el riesgo de saturar la gestión con otra nueva prioridad.
El objetivo de los Servicios de prevención tiene que ser doble:
- - Ofrecer un servicio de prevención a empresas de diversos sectores que les permita cumplir con la Ley 31/95 de Prevención de Riesgos Laborales.
- - Prestar un servicio que adicionalmente integre un sistema de prevención de riesgos laborales dentro del sistema de gestión de la empresa que aumente la productividad y el rendimiento empresarial.
Tienen que saber mostrar a las empresas que los efectos positivos sobre el empleo y la competitividad de las inversiones en materia de salud y seguridad en el trabajo mediante la realización de análisis de costes/beneficios para evaluar las repercusiones de estas inversiones, mostrando como las medidas de protección de la salud y la seguridad en el trabajo contribuyen a mejorar las condiciones de trabajo y a estimular la productividad, el empleo y la competitividad.
Deben de saber introducir en las empresas un conjunto de aspectos claramente exitosos, como pueden ser:
- - Señalando que se logran mejores resultados combinando los objetivos del negocio con las actividades de recursos humanos.
- - Realizando un enfoque más amplio de la promoción de la salud, para incluir no sólo las condiciones de seguridad y salud sino también las actitudes del trabajador y la cultura corporativa.
- - Utilizando programas de mejora en seguridad y salud laboral, ya que parece que ofrecen mejores resultados que la puesta en práctica de medidas específicas de prevención.
- - Incluyendo innovaciones técnicas y desarrollos organizativos en sus recomendaciones.
- - Realizando medidas y evaluaciones que demuestren la rentabilidad de la inversión en seguridad y salud. Así, por ejemplo, la prevención del estrés, o la mejora ergonómica no sólo reducía costes sino que mejora la productividad, la motivación del personal y el clima laboral.
Fuente: Diarioresponsable